Uruguayos y uruguaya
...los mates con amigos...ese es el mejor recuerdo que tengo de Uruguay.
...Claudia...una uruguaya que vive en la Plaza de la Independencia. Fue en su casa donde conocí el "ritual" del mate, tenía una "matera" llena de pegatinas...Desde las alturas del piso 16 dominabas de un vistazo la ciudad vieja. Fue con Claudia con quien más hablé de política, fue ella quien me contó las esperanzas depositadas en Tabaré Vázquez después de tanto tiempo de gobierno de la derecha(blancos y colorados, colorados y blancos), quien me contó quien eran o son los tupamaros. Fue ella quien me explicó el conflicto de las papeleras, quien me regaló un libro de mi poeta preferido, Benedetti, con una dedicatoria de esas que hacen poner la piel de gallina. Te acuerdas Claudia de ese paseo por el malecón, de la conversación frente al mar, ese mar que nos une y nos separa...? Claudia fue todo un descubrimiento, Claudia es una de esas personas que merecen la pena.
...y Jose...mi amigo "uruguaxo"...de Durazno...apicultor y estudiante. Jose fue de repente mi guía en Montevideo. Con él descubrí el Mercado del Puerto, los puestos callejeros, las tiendas de artesanía...descubrí que los semáforos de peatones en ese país no se ponen en rojo o en verde, sino que dicen "pase" o "no pase" , los diarios uruguayos "El Mundo" y "El Pais". Con él me empapé un día que comenzó a llover mientras charlábamos al borde del embarcadero, con él compartí confidencias una noche al borde del Río de la Plata...Con él descubrí que son suficientes unos días...unas horas...para encontrar a un amigo.
Jose me llevó hasta Joselo, un uruguayo con el que coincidí un año antes en Buenos Aires, y que resultó ser su compañero de piso. Joselo, mi amigo "de derechas", como le llamó yo. Juntos descubrimos que el mundo es muy pequeño.
Y Diego, un periodista del diario Brecha, un nieto de emigrantes, una persona de esas que nunca tenemos muy claro que existan, alguien que vota en las elecciones municipales en Galicia. Diego me enseñó que estando lejos se puede estar muy cerca, comprobé como se siente Galicia sin vivirla...Compartimos nuestra estresada vida, la necesidad a veces de decir stop, compartimos...un largo paseo tratando de arreglar el mundo.
...Claudia...una uruguaya que vive en la Plaza de la Independencia. Fue en su casa donde conocí el "ritual" del mate, tenía una "matera" llena de pegatinas...Desde las alturas del piso 16 dominabas de un vistazo la ciudad vieja. Fue con Claudia con quien más hablé de política, fue ella quien me contó las esperanzas depositadas en Tabaré Vázquez después de tanto tiempo de gobierno de la derecha(blancos y colorados, colorados y blancos), quien me contó quien eran o son los tupamaros. Fue ella quien me explicó el conflicto de las papeleras, quien me regaló un libro de mi poeta preferido, Benedetti, con una dedicatoria de esas que hacen poner la piel de gallina. Te acuerdas Claudia de ese paseo por el malecón, de la conversación frente al mar, ese mar que nos une y nos separa...? Claudia fue todo un descubrimiento, Claudia es una de esas personas que merecen la pena.
...y Jose...mi amigo "uruguaxo"...de Durazno...apicultor y estudiante. Jose fue de repente mi guía en Montevideo. Con él descubrí el Mercado del Puerto, los puestos callejeros, las tiendas de artesanía...descubrí que los semáforos de peatones en ese país no se ponen en rojo o en verde, sino que dicen "pase" o "no pase" , los diarios uruguayos "El Mundo" y "El Pais". Con él me empapé un día que comenzó a llover mientras charlábamos al borde del embarcadero, con él compartí confidencias una noche al borde del Río de la Plata...Con él descubrí que son suficientes unos días...unas horas...para encontrar a un amigo.
Jose me llevó hasta Joselo, un uruguayo con el que coincidí un año antes en Buenos Aires, y que resultó ser su compañero de piso. Joselo, mi amigo "de derechas", como le llamó yo. Juntos descubrimos que el mundo es muy pequeño.
Y Diego, un periodista del diario Brecha, un nieto de emigrantes, una persona de esas que nunca tenemos muy claro que existan, alguien que vota en las elecciones municipales en Galicia. Diego me enseñó que estando lejos se puede estar muy cerca, comprobé como se siente Galicia sin vivirla...Compartimos nuestra estresada vida, la necesidad a veces de decir stop, compartimos...un largo paseo tratando de arreglar el mundo.
Guille, un español al que conocí en Uruguay, nuestro "niño", mi compañero de "Titanic"...un aventurero encantador...
Este es el mejor recuerdo de Uruguay, las risas con ellos...las secretas confidencias...las charlas entre amigos...los bailes de madrugada...los mates....los momentos compartidos, ta?
Este es el mejor recuerdo de Uruguay, las risas con ellos...las secretas confidencias...las charlas entre amigos...los bailes de madrugada...los mates....los momentos compartidos, ta?
1 comentario:
Vaia, non sei como cheguei ao teu blog pero creo que temos coincidencias. Estiven en Uruguai dando clase de galego durante un tempo e o teu ritual do mate faime lembrar bos momentos. Case catro anos alá dan para sentir morriña á inversa. Vin a parte do persoal interino, eu son do ensino secundario e secundo que é inxusto, creo que xa se lle dan máis privilexios dos que merecen nesta nova convocatoria.. ¿qué carajo é iso do informe???... En fin, ando por compostela, teño yerba Canarias, teño mate e teño bombilla... se queres un día mateamos por algún parque.
Saúdos.
Publicar un comentario